Vietnam es la nueva patria adoptada por los izquierdistas. Antes de Vietnam, era Argelia, antes de eso fue Cuba, y anterior a ellos fue Rusia, y así sucesivamente existen muchos ejemplos más hoy en día. Su apoyo hacia el Vietcong no depende de lo que actualmente está sucediendo en Vietnam, más bien es una expresión del desaliento de los izquierdistas con ciertos aspectos de la sociedad moderna. Hasta cierta manera es irracional.
Sin embargo, esos que apoyan el Vietcong se imaginan que son Marxistas, o son comunistas, y es usando términos seudo-Marxistas, o seudo-socialistas-comunistas que ellos racionalizan su apoyo por este movimiento nacionalista, el cual su objetivo principal es el establecimiento de un régimen basado en el capitalismo de estado en el Sur, similar a el que existe en el Norte. El Vietcong y su líder fundador Hao-Chi-Ming eran nacionalista y seguidores de la corriente política del nacionalismo burgués
El Vietcong no es un movimiento socialista, y no tiene nada que ver con el Socialismo-comunismo. Debido a que muchos vociferan: ‘Que viva el Vietcong” y han usado a Marx y al socialismo como pretexto, debemos refutar sus argumentos y decir porque los Socialistas no apoyamos a el Vietcong, los movimientos nacionalistas, las guerras de liberación nacional, cualquier tipo de gobierno, y cualquier tipo de guerra..
Los izquierdistas usan dos argumentos básicos: Primeramente, que los Socialistas deben apoyar todo movimiento, aun si no es socialista, y más si debilita ‘El imperialismo Norteamericano”, el cual ellos dicen que es la principal amenaza en contra de las revoluciones sociales en el mundo entero, así como Marx apoyo revoluciones en contra de Rusia Zarista, esto viene desde los tiempos de Lenin, y el otro argumento, es que el Vietcong y los trabajadores en Occidente están luchando por el mismo enemigo común, el cual es el imperialismo, por lo tanto debemos apoyarnos los unos con los otros.
Es verdad que durante la mitad del Siglo XIX Marx vio que Rusia Zarista era el ‘Gendarme de Europa”, y era una gran amenaza para el progreso social de la humanidad. Él sintió que si Rusia tomaba a Europa Occidental aplastará los movimientos democráticos y atrasaría las revoluciones sociales por muchos años, por lo tanto, él estaba dispuesto a apoyar cualquier movimiento que podría debilitar el poder de la Rusia Zarista.
El apoyo de Gran Bretaña, Francia y Turquía en la Guerra de Crimea. El apoyo a la existencia de un Estado Polaco independiente para que fuera un amortiguador entre Rusia y el resto de Europa. El hizo todo lo que pudo para demostrar la política pro rusa y de intriga de Lord Palmerston. Parecen como actividades extrañas para un socialista, y en verdad nosotros hemos criticado a Marx por estas acciones.
Marx argumentaba que antes de que el socialismo pudiera realizarse la sociedad debería pasar por una etapa de desarrollo capitalista. Pero, esto no es un proceso automático, esto depende del fruto de la lucha de los seres humanos. Rusia era reaccionaria en el propio sentido de la palabra, debido a que era una amenaza para el desarrollo también del capitalismo. Marx se opuso a la Rusia Zarista, no porque era el poder capitalista más poderoso, sino, porque era el poder anti-capitalista más poderoso
Mirando hacia atrás podemos ver que Marx fue sobre-optimista en cuanto a la realización del surgimiento de revoluciones socialistas en Europa. Con el tiempo los estados capitalistas de Europa Occidental crecieron con más poder y la Rusia zarista se debilitó, finalmente fue destruida junto con Austria, Hungría, y el imperio Alemán en las dos primeras guerras mundiales. Aun antes de eso, Rusia para poder mantener sus fuerzas armadas se tuvo que endeudar con los capitalistas de Francia y Bélgica. Antes de finalizar el siglo XX, las condiciones del mundo habían cambiado mucho desde los tiempos de Marx. El capitalismo está firmemente establecido como el nuevo orden mundial. Rusia ya no es una amenaza.
El objetivo de los socialistas es más claro aún, el cual fue oponerse a todas las guerras, a todos los gobiernos, y movimientos nacionalistas, y luchar hacia la formación de un movimiento obrero mundial con el fin de establecer una nueva sociedad, de posesión común y democrática de los medios de producción, y la eliminación total del trabajador asalariado. Esto siempre ha sido el objetivo principal del Partido Socialista de Gran Bretona, sus partidos acompañantes, y el Movimiento Socialista Mundial..
Hoy en día el capitalismo domina en todos los confines sobre la tierra, tanto en Rusia, en China, en Occidente, en el Medio Oriente, en Asia, en Australia, en América Latina, y en todos los países del mundo. Hablar del ‘Imperialismo Americano, o Estadounidenses” como el peligro principal es jugar la misma partida que el capitalismo de estado Ruso o Chino. Todo estado y poder capitalista nuevo, o emergente encuentra a el mundo ya dividido y fraccionado por poderes establecidos con anterioridad a ellos, y para poder expandirse, y buscar nuevos mercados tendrían que entrar en conflictos con estos poderes ya establecidos, así como Alemania, Japón, Italia, y Rusia tuvieron que confrontar a otros imperios capitalistas, y China también ha ido también encontrando poderes establecidos en su camino de desarrollo capitalista.
Todos ellos de una manera u otra han tocado los tambores del ‘anti-imperialismo”, se han opuesto a la dominación de Francia, de Gran Bretaña, y últimamente a la dominación del capitalismo Estadounidenses, como ha ido sucediendo últimamente en América Latina. Mussolini mismo calificó a Italia como una “nación proletaria”, en una guerra de clase en contra de las ‘naciones burguesas”, La Alemania Nazis exaltó el nacionalismo Latino Americano y Árabe. Japón también lanzó la consigna de ‘Asia para los Asiáticos”, Rusia y China también, así como con anterioridad los capitalistas Alemanes vociferaban y denunciaron al imperialismo Anglo-Frances-Americano.
Naturalmente, los socialistas no permiten ser usados como herramientas de los estados capitalistas. como la mayoría de los que vociferaban su apoyo a el Vietcong ( algunos sabían lo que estaban haciendo ) . Los socialistas-comunistas se oponen a todo tipo de capitalismo y a todos los gobiernos del mundo sin ninguna excepción, a todos los tipos de guerras, y a todos los movimientos nacionalistas.
Vladimir Lenin no lo pudo creer cuando él supo que la Socialdemocracia Alemana había votado a favor de los créditos de guerra en 1914. Más tarde él elaboró una teoría para tratar de explicarlo, que fue su teoría del Imperialismo ( En su libro el Imperialismo como fase superior del capitalismo.) Básicamente el argumentaba que las ganancias eran más grandes en los países subdesarrollados, lo que motivaba a los capitalistas a invertir en ellos, esto condujo a los capitalistas entrar en continuos conflictos para dividir el mundo. Parte de las súper-ganancias de esta explotación capitalista era usada para pagar los altos salarios y proveer reformas sociales a los trabajadores de las metrópolis. Hubieron quienes se dejaron confundir y pasaron desde el campo del socialismo revolucionario hacia el campo del oportunismo y del reformismo burgués
Esta teoría es totalmente errónea en todos sus aspectos. No ha sido probado que la tasa de ganancias sea más grande en los territorios coloniales que en las metrópolis( usando la terminología de Lenin ) . Existe una explicación más sencilla y más certera para la expansión del capitalismo en territorios subdesarrollados en el mundo durante los años cuarenta antes de la primera guerra mundial, y era la necesidad de asegurar reservas de materias primas para la expansión de la industria en las metrópolis, y luego asegurar puntos estratégicos y proteger estas reservas y las rutas de mercados desde las colonias hacia los lugares de orígenes de las potencias. La explicación reformista de Lenin sobre esta cuestión es puramente absurda y es totalmente contraria a la explicación de Marx sobre lo que es explotación capitalista.
El sugerir que los obreros comparten la plusvalía de la explotación colonial es rechazar la teoría Marxiana del valor del trabajo, la cual dice que es el precio es el pago por la fuerza de trabajo. Pero, este argumento fue parte esencial de la teoría de Lenin. Basado en esta falsa teoría es que ha surgido la estrategia de darle apoyo a el anti-imperialismo, a gobiernos y líderes anti-imperialistas, y a los movimientos nacionalistas. Si triunfaba en esta lucha él creía, se depararía a los estados imperialistas de las súper-ganancias, y su habilidad de comprar sus trabajadores. Deprivar a los trabajadores su porción de los salarios bajaría las condiciones de vida de los trabajadores y ellos se convertirían en revolucionarios, para la creación de un partido de vanguardia al estilo de los Bolcheviques.
Este es el pensamiento típico de Lenin, en contar con factores fuera del desarrollo de la clase obrera misma para crear las condiciones para una revolución social. Esto encaja perfectamente dentro de la idea de los Bolcheviques de que los trabajadores deberían ser manipulados por un partido de vanguardias, y por profesionales entrenados por el partido, o los que se conocen como cuadros del partido. Cualquier atajo hacia el socialismo es una encrucijada, o un camino muerto como todos los demás.
Por supuesto que una derrota en Vietnam, en el Sudeste de Asia, podría traer serias consecuencias al capitalismo Estadounidenses. Esa es la razón porque los capitalistas Americanos están llevando una guerra en ese lugar. le quitaría a ellos el acceso a muchas materias primas, pero, lo más importante es que el balance de poder en Pacifico se inclinaría hacia los capitalistas chinos, o el capitalismo de estado chino. No es verdad que el Vietcong y los trabajadores peleaban por el mismo enemigo.
El Vietcong peleaba el capitalismo Norteamericano. Los intereses de los trabajadores están en oposición no solo a los intereses de los capitalistas de EEUU, sino en contra de los capitalistas en todas partes del mundo, incluyendo Rusia, y China. Una victoria para el Vietcong, inclinaría la balanza de poder hacia otras potencias capitalistas del mundo. Esto es algo que los trabajadores que es de intereses para los obreros, es algo que ellos no deberían apoyar tampoco. No existe nada en Vietnam que valga la pena para que los obreros sacrifiquen sus vidas.
El Partido Socialista, por lo tanto, se opone a la guerra de Vietnam, así como a todas las guerras. No tomamos partidos con ningún bando. No somos hipócritas como algunos cínicamente usan como pretexto el que niños, mujeres, y ancianos hayan sido quemados en esa guerra ( como si el Vietcong tampoco no hizo lo mismo también ) para así conseguir apoyo en esa guerra, y parcializarse con unos de los bandos envueltos. Estas personas no quieren que la guerra termine, ellos quieren continuar hasta que unos de los bandos ganen la guerra, Por lo menos seamos honestos, y no tratemos de enganar mas las gentes con la falsa consigna del antiimperialismo, aprovechándose de los sentimientos anti-guerra de los seres humanos.–
Por una sociedad sin clases, sin estado, sin sistema monetario, y sin líderes!