En el
transcurso del siglo XX el concepto de socialismo ha llegado
a ser transformado de un movimiento con objetivos asociado con
la emancipación de la clase obrera, en un movimiento con objetivos
relacionados con la llegada al poder de nacionalistas, y elites
anti-imperialistas en los lugares económicamente menos desarrollados
del mundo.
El punto de partida fue
la llegada al poder en Rusia en el 1917 de una elite que había
heredado su ideología del movimiento obrero, pero que en la práctica
utilizo el Estado para desarrollar económicamente a Rusia y
convertirla en una potencia que desafió a la dominación hegemónica
del mundo junto con Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia.
Como tal, proporcionó un modelo atractivo para la modernización de
las élites en otros países que sufrían del atraso económico
y la dominación por parte de los Estados capitalistas industriales
avanzadas de Occidente
El problema es que estas
élites continuaron usando el lenguaje y la terminología del
movimiento obreros con los que una vez estos conceptos habían
estado asociados. Por lo tanto, describieron su toma del poder como
una “revolución de los trabajadores”, y su árido régimen
fue llamado “Estado Obrero”, un ejemplo el cual todos los
trabajadores del mundo debían apoyar, Y describieron la
acumulación de capital bajo los auspicios del Estado que estaban
llevando a cabo no como capitalismo de estado, sino como
“socialismo”.
Marx, quien había señalado que
cuando se estudiaba la historia debería analizarse los
movimientos sociales y políticos no por lo que decían, sino
por los resultados materiales de lo que estaban haciendo, habría
sido el primero en comprender que sus propias teorías,
se había convertido en la bandera de luchas muy diferentes sobre las
cuales el escribió.
La Revolución inglesa de la década
del 1640 se llevó a cabo bajo una ideología que se derivó del
Antiguo Testamento. La Revolución francesa de la década de 1790 se
derivó de la época de los romanos. La Revolución rusa, la
cual fue el equivalente de estas revoluciones anti —
feudales, se llevó a cabo derivándose de las ideas del movimiento
obrero, pero no fue más que un intento de establecer el socialismo,
así como lo había sido la Revolución inglesa con la intención de
establecer la nueva Jerusalén, o la revolución francesa para
revivir la República Romana.
Aunque fue Mao
quien reemplazó la consigna “Trabajadores del mundo uníos”
por “Pueblos oprimidos del mundo uníos”, las raíces de
este cambio de perspectiva se remonta a los tiempos de Vladimir
Lenin
Etapa más alta de Lenin (Imperialismo Fase
Superior del Capitalismo)
En el exilio en Suiza en medio
de la primera guerra mundial Lenin escribió un panfleto que él
había titulado: “El imperialismo, fase superior del capitalismo”.
En el argumentó que, a través de un proceso que había sido
completado al final del siglo, el capitalismo había cambiado su
carácter. El Capital industrial y el capital bancario se
habían fusionado para convertirse en capital financiero,
y la competencia capitalista había dado paso al capitalismo
monopolista en el cual Trust, Carteles y otros acuerdos
monopolísticos habían llegado a dominar la producción. Explicaba
Lenin que debido al declive de ganancias de las inversiones en las
metrópolis, estos monopolios estaban bajo presión económica para
exportar capitales e invertirlos en las zonas económicamente
más atrasadas del mundo donde las ganancias eran superiores.
Por lo tanto, Lenin enfatizaba que la lucha de los países
capitalistas industriales avanzados era asegurarse de mantener
las colonias donde estas súper-ganancias eran obtenidas.
Lenin
exageraba ambas cuestiones, tanto el grado en que el
capitalismo se había convertido en monopolio y la diferencia entre
la tasa de ganancia en las metrópolis en comparación con las
zonas económicamente atrasadas del mundo. Pero las implicaciones
políticas de su teoría iban a probar ser bastante
perjudiciales para el movimiento obrero.
Después del
1917, cuando Lenin se convirtió en unos de los comisario del
régimen bolchevique en Rusia, la teoría se amplió para
argumentar que los países imperialistas estaban explotando
toda la población de las zonas económicamente atrasadas que ellos
controlaban, e inclusive argumentaron que una sección de la
clase obrera en los países imperialistas se beneficiaron de la
súper- ganancias obtenidos de la explotación imperialista de estos
países en forma de reformas sociales y salarios más elevados,
Esto
era una tontería en términos de economía Marxiana que no mide el
nivel de explotación basado en los altos o bajos salarios,
sino en relación con la cantidad de plusvalía producida en
comparación con el monto de los salarios pagados, sean altos o
bajos. Por esta medida se determina que los trabajadores de los
países avanzados eran más explotados que los de las colonias,
a pesar de sus altos salarios debido a que cada obrero producía
mayores ganancias.
La ampliación de la teoría de
Lenin transformo la lucha entre una clase obrera internacional
y una clase capitalista internacional, en una lucha entre estados
imperialistas y estados anti-imperialistas. La lucha de clase
internacional que el socialismo abogaba fue reemplazada por
una lucha internacional entre los Estados.
La Revolución
rusa fue situada dentro de un contexto anti-imperialista. Todo el
análisis de Marx sobre el capitalismo era que el movimiento obrero
primero triunfaría en los lugares económicamente más
avanzados del mundo, no en lugares relativamente atrasados
económicamente como como era Rusia. Lenin explicó esta
contradicción argumentando que Marx había descrito tal situación
en la etapa pre- imperialista del capitalismo, y que una nueva etapa
imperialista había evolucionado después de su muerte, el
Estado capitalista era tan fuerte que el desenlace no tendría
lugar en un país capitalista avanzado, sino en Estados imperialistas
más débiles. Rusia zarista había sido el eslabón más débil de
la cadena de países imperialistas y esto explica por qué fue allí
donde se había producido la primera “revolución de los
trabajadores”.
Esto equivalía a decir que la
Revolución rusa fue la primera revolución anti-imperialista, y en
un sentido lo fue. Rusia fue el primer país en zafarse de la
dominación de los países capitalistas occidentales, y seguir
un camino de desarrollo económico que dependía sobre el uso del
Estado para acumular capital internamente, en vez de depender de la
exportación de capital procedente de otros países.
En
los primeros días del régimen bolchevique, cuando Rusia se enfrentó
a una guerra civil y la intervención exterior por las potencias
capitalistas occidentales, Lenin comprendió que el anti-imperialismo
era una carta que se podía jugar para intentar salvar a su
régimen. Jugando la carta del anti – imperialismo significaba
apelar a las masas trabajadoras de Asia no para establecer el
socialismo, sino para llevar a cabo sus propias revoluciones
anti-imperialistas. Los países “súper-explotados” fueron
alentados a buscar la independencia debido a que esto debilitaría
los Estados imperialistas, que estaban poniendo presión sobre la
Rusia bolchevique.
Esta estrategia fue presentada al
movimiento obrero de Occidente como una manera de provocar la
Revolución Socialista en sus países. La clase dominante de los
países imperialistas privados de sus súper-ganancias ya no
serían capaces de sobornar a sus trabajadores con reformas
sociales y salarios más altos; los trabajadores dejarían de ser
seguidores del reformismo para abrazar la revolución
socialista.
Después de la muerte de Lenin en 1924,
esta estrategia de la formación de un frente “anti-imperialista”
contra Occidente fue continuada por sus sucesores. Debido a que esta
estrategia ensenaba que todos los ciudadanos de una colonia, o en un
país dominado tenían un interés común en la obtención de su
independencia, es decir, un Estado propio, fue muy atractiva para
los ideólogos nacionalistas y políticos de estos
países.
Hicieron un llamamiento a todos los
habitantes de estos países para unirlos detrás de ellos en
una lucha común para lograr la independencia. Como resultado
de esta estrategia, en estos países el “socialismo” se
asoció con el nacionalismo militante en lugar del internacionalismo
de la clase obrero que había sido con anterioridad el
planteamiento correcto. La lucha política llegó a ser vista como
una lucha, no entre la clase trabajadora y la clase capitalista,
sino como una lucha de todos los elementos patriotas,
trabajadores, campesinos y capitalistas juntos, contra un puñado de
elementos antipatriotas, traidores, quienes se habrían vendido a los
imperialistas extranjeros.
El socialismo y el
Marxismo, en su sentido original, en realidad, nunca han existido, ni
se conoce en muchos países del mundo. Lo que se conoció y se
conoce como marxismo o socialismo es Leninismo. . Sólo ha sido
hacia el final de este siglo que grupos de trabajadores de estos
países han llegado a darse cuenta de que el leninismo y su ideología
anti-imperialista no tenían nada que ver con el socialismo real.
Pero el daño ya había sido hecho. Para millones de
trabajadores en gran parte del mundo socialismo aún significa
nacionalismo, patriotismo, y capitalismo de estado que algunos
de ellos todavía ven como algo positivo en lugar de ser una
barrera para la cooperación muta de la clase obrera más allá
de las fronteras nacionales la cual es una condición esencial
para el socialismo.
A través de la influencia que
el capitalismo de estado Ruso ejerció dentro del movimiento obrero
de los países Occidentales, para muchos de los militantes obreros en
estos países, el socialismo significo lo mismo. Los
gobernantes rusos utilizaron los partidos comunistas fuera de Rusia
como simples auxiliares de su política exterior, basados en
los intereses estratégicos de Rusia. Era “progresista”
todo aquello que concedía con la política exterior de los
intereses del capitalismo Ruso
Durante
la década de 1950, Rusia se trasladó hacia una política de
aceptación del statu quo con Occidente conocido como la
“coexistencia pacífica”. Los Leninistas Chinos, quienes
llegaron al poder bajo Mao en 1949, percibieron el
interés de su estado de una forma diferente y trataron
de convertirse en los campeones del “antiimperialismo” en
lugar de Rusia.
Las divisiones que
surgieron en el movimiento comunista mundial fueron provocadas
no tan superficialmente como aparentaban ser el
caso, por las diferencias sobre qué tácticas debería seguir el
movimiento de los trabajadores, más bien fue sobre qué política de
un llamado país socialista los obreros deberían apoyar. . Esta no
fue una disputa que concernía a los intereses de la clase obrera.
.
Desde sus inicios la teoría del
anti-imperialismo de Lenin ha sido una desvergüenza al
socialismo, debido a que ha convertido la lucha principal en el
mundo que es la lucha de clase, en una lucha entre
estados imperialistas llamados reaccionarios, y estados
anti-imperialistas llamados progresistas. Esta teoría ha sido una
peligrosa distorsion de la lucha de clase, lo cual ha motivado a que
los trabajadores apoyen el asesinato de otros obreros en la defensa
de los intereses de otros estados y su clase dominante
Movimiento
Socialista Mundial